RESISTE SÓLO UN POCO MÁS
“Con toda mi alma espero al Señor y confío en
su palabra”. Salmos 130: 5
Me gusta mucho
comprobar como en la Biblia se repite un mensaje o una palabra cuando se quiere
dar énfasis o afirmar algo.
En Proverbios 22:20-21 leemos:
20 ¿No te he escrito tres veces En consejos y en
ciencia, 21 Para
hacerte saber la certidumbre de las palabras de verdad, A fin de que
vuelvas a llevar palabras de verdad a los que te enviaron?
Podría citar hoy
la archi conocida negación de Pedro. Pedro
le había garantizado a Jesús que daría su vida por él, porque estaba muy
convencido de que le amaba con todo su corazón. Jesús quería demostrar a su
discípulo amado que nada podría hacer en su fuerza de ahí que le dice que en
una misma noche será capaz de negar a su maestro tres veces, y así sucede.
Lucas 22:34
Pero {Jesús le} dijo: Te digo, Pedro, que el gallo
no cantará hoy hasta que tú hayas negado tres veces que me conoces.
Lucas 22:61
Entonces el Señor se volvió y miró a Pedro. Y
recordó Pedro la palabra del Señor, cómo le había dicho: Antes que el gallo
cante hoy, me negarás tres
veces.
Cuando Jesús
comisionó a Pedro, también repitió su deseo de que el discípulo fuera un pastor
de ovejas, tres veces:
Juan 21:17
Le dijo por tercera vez: Simón, {hijo} de Juan, ¿me
quieres? Pedro se entristeció porque la tercera vez le dijo: ¿Me quieres? Y le respondió:
Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te quiero. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas.
La experiencia
de Pedro con la extensión del evangelio a los gentiles através de una visión:
11 y
vio el cielo abierto, y que descendía algo semejante a un gran lienzo, que
atado de las cuatro puntas era bajado a la tierra; 12 en el
cual había de todos los cuadrúpedos terrestres y reptiles y aves del cielo. 13 Y
le vino una voz: Levántate, Pedro, mata y come. …16 Esto se hizo tres veces;
y aquel lienzo volvió a ser recogido en el cielo.
La razón por la
que Pablo estaba seguro de su necesidad y dependencia de la gracia de Dios para
vivir y lidiar con el agijón en su carne:
8 respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite
de mí 9 Y
me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la
debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades,
para que repose sobre mí el poder de Cristo.
Después de que
Dios tres veces dio la misma respuesta el apóstol resolvió gloriarse de buena
gana en sus debilidades, para así, permitir que el poder de Cristo reposara
sobre él.
Son muchos los
ejemplos que podría poner pero creo que el mensaje ha sido claro.
¿Qué vas a hacer
con aquello que Dios te ha dicho tres veces?
Medita en las palabras
de Dios para tu vida. Trata de recordar la frecuencia con que una determinada
palabra se ha repetido. Piensa que incluso ha sido dada por personas diferentes
y en momentos diferentes. ¿No crees que debes darle el valor que esa palabra
tiene? ¿No debería ser tu reacción y mi reacción como la del apóstol Pablo? Él dijo,
por tanto…. que es lo mismo que decir:
… resuelvo hacer
esto…
… decido hacer
esto…
… estoy
determinado sin lugar a dudas a…
Hace ya un tiempo, me sentía algo triste durante un culto porque ciertas cosas que Dios ha
hablado acerca de mi vida y la vida de mi familia no se cumplían. Había batallado
por mucho tiempo contra todas las banderas para seguir creyendo, pero, nada. No
sólo no se cumplían sino que todo a mí alrededor gritaba: ¡es imposible que esa
palabra se cumpla. No hay nada qué puedas esperar! Ya había terminado la
predicación y también se terminaba el tiempo de la ministración cuando el
pastor dijo estas palabras:
“Resiste, no te
rindas, espera sólo un poco más, resiste cinco minutos más, ya casi llega.” Y a
estas palabras siguieron otras que ilustraban específicamente las situaciones
que estábamos viviendo. Todo estaba claro. Cobré ánimo y le dije al Señor: “Voy
a resistir, ayúdame a resistir. A quién iré”. Toda la noche estuve meditando en
la situación que teníamos y en las palabras de Dios y de alguna manera mi
corazón, aunque triste, se animó.
Al día
siguiente, Dios se encargó de decir dos veces más a través de otras personas y
en momentos diferentes, las mismas palabras: “Resiste sólo un poco más, la victoria
está cerca. No te dejes llevar por lo que ven tus ojos. Nada de lo que ves tiene
el poder de impedir que Dios haga lo que te ha prometido. Dios siempre cumple
sus promesas. Resiste”. Estaba claro que resistir era el mensaje de Dios. Las circunstancias
no iban a cambiar pero yo debía esperar sin dudar, porque FIEL es que prometió.
Yo sé que esta experiencia
no es exclusiva de mi familia y mía. Quizás mis palabras hoy sean para ti la
segunda o la tercera vez. Quizás no. Sin embargo la verdad que yace en mi
experiencia y que te comparto hoy es que: Dios cumple sus promesas. Aunque no
lo haya dicho tres veces o no recuerdes que lo haya hecho no importa: Dios cumple
lo que promete. Él no es como nosotros que hacemos promesas y luego no recordamos
más lo que dijimos. Tampoco habla movido por las emociones o por la presión de
los demás. Sus palabras son fieles, veraces y SIEMPRE se cumplen. Sólo tienes
que resistir un poco más porque el cumplimiento está cerca. El mismo Dios que
prometió te dará las fuerzas para resistir hasta que puedas ver la palabra
cumplida.
Esta canción, “Way
maker” (El que hace caminos), animó mi corazón y espero te anime a ti también
porque así es nuestro Dios:
Aquí estas, te vemos mover, te adoraré,
te adoraré
Aquí estás, obrando en mí, te adoraré,
te adoraré
CORO
//Milagroso, abres camino, cumples
promesas, luz en tinieblas, mi Dios, así eres tú//
Aquí estas tocando, mi corazón, te
adoraré, te adoraré.
Aquí estas sanando mi corazón, te
adoraré, te adoraré.
Puente
//Aunque no
pueda ver estas obrando. Aunque no pueda ver estás obrando. Siempre estás,
siempre estás obrando. Siempre estás, siempre estás obrando//
Coro
//Milagroso,
abres caminos, cumples promesas, luz en tinieblas, mi Dios, así eres tú//
Así es nuestro
Dios. Podemos resistir y esperar en Él porque Él cumple sus promesas. Él hace caminos donde no lo hay, aún hoy obra milagros a los que en Él esperan y Su luz es capaz de iluminar las más densas tinieblas. Así es nuestro Dios.
Bendiciones mil.
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